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miércoles, 2 de febrero de 2011

Un invierno con velas


Desde hace algo más de un més que me ha entrado el capricho de encender velas en casa, quizá sera el frío invierno quien me invita a sentarme alrededor del fuego. Pero la inde de tener una chimenea de las de verdad en un piso, no me parece nada práctica, por no disponer de espacio para almacenar la leña.

Decorando tu casa con velas podrás conseguir calidez. He aquí unas recomendaciones que te ayudarán a crear el ambiente deseado.

Podemos utilizar velas de todos los colores y tamaños, todo es cuestión de ubicarlas en el lugar más apropiado.

Utiliza siempre velas aromáticas naturales, sin parafina, aunque sean algo más caras no resultan tóxicas.

En la mesa de centro, puedes crear un arreglo agrupando varias velas de distintos grosores y alturas, siempre del mismo color, sobre una base plana con algún relleno de piedras, arena, granos de café, etc...

También puedes colocar un sencillo centro de cristal lleno de agua con velitas flotantes, y si quieres lograr un ambiente más fresco, añade alguna flor u hoja, piedras,...

Si tienes piscina, resultarán ideales este tipo de velas flotando sobre ella, en una fiesta nocturna en el jardín. Aunque eso sí, tendrás que colocar bastantes para lograr el efecto deseado.

Y en una fiesta dentro de casa, puedes llenar la bañera y colocra unas velitas flotantes, ¡Lograrás sorprender a tus invitados cuando vayan al lavabo!

Si tienes chimenea y no la utilizas, resulta muy acogedor agrupar velas y encenderlas dentro de ella, tanto en invierno como en verano.

Y además, también están los candelabros de forja, cristal, cerámica,...ahí ya depende de tus gustos personales.

Te recomiendo velas en la mesa de comedor. Una cena y un buen vino saben mejor a la luz de las velas.

Y en la intimidad del dormitorio, más velas.

Anímate con las velas, sobre todo en el salón, por la noche, cuando descansas, te sientas a ver la televisión o a leer un buen libro,...